Bolivia firmó acuerdos para fortalecer interconexiones con países vecinos e impulsar la cooperación y desarrollo energético. Argentina es un primer país interconectado, avanza con Brasil, Chile y Paraguay.
La Comisión de Integración Energética Regional – CIER, en cooperación con el Comité Boliviano de CIER – BOCIER organizaron el evento “Bolivia Avanzando hacia la Integración Eléctrica” en el que se analizó el avance de las iniciativas en la región, el estado actual de los proyectos que han sido priorizados dentro de las iniciativas definidas, identificando los factores de éxito que conducen a su pronta materialización, e impulsar una Hoja de Ruta nacional para la interconexión de Bolivia con sus países vecinos, en el marco de la estrategia sectorial para atender los nuevos retos y desafíos derivados de la transición energética.
Participaron autoridades del gobierno nacional, empresas de transmisión, Comités Nacionales de la CIER de Bolivia, Argentina, Paraguay, Brasil, representantes de Chile y profesionales del BID y CAF.
“Bolivia es una bisagra natural entre la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y el Mercado Común del Sur (Mercosur), está situada entre los dos principales centros de generación y consumo eléctrico, lo que puede ayudar a reducir los costos de transmisión”, afirmó el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, durante su intervención.
Explicó que la integración energética dejó de ser una opción y hoy es una prioridad, ya que no solo permite alcanzar una mayor eficiencia energética, sino que también incrementa la resiliencia ante el cambio climático.
En ese sentido, la autoridad mencionó que, en materia de interconexión eléctrica, el gobierno efectuó gestiones para fortalecer la integración con Perú, Chile, Paraguay, Argentina y Brasil, con varios proyectos que están en marcha.
Al concluir el evento, el presidente de la CIER, Marcelo Cassin firmó un acuerdo con el representante del Comité Boliviano de la CIER – BOCIER, Filberto Soto, para continuar trabajando en coordinación con la Comisión de Integración Energética Regional en el camino de integración con todos nuestros países vecinos .
En ese contexto, Soto indicó que en el caso de Argentina, que ya está plasmada la interconexión con Bolivia, el plan es mejorarla. Con respecto a la interconexión con Brasil ya se avanzó en una primera fase para importar 5 MW de potencia; 2,5 MW para Cobija y 2,5 MW para Guayaramerín. “Posteriormente pensamos interconectar 138 kilovoltios para cubrir la demanda de estas dos zonas, además de Riberalta”, dijo.
En el marco conceptual de la integración eléctrica: Lecciones aprendidas y condiciones para el desarrollo de los proyectos en Bolivia, se presentó un informe de actualización de estudios para conectarse con Paraguay, entre Loma Plata – Yaguacua como la mejor opción en el análisis económico y eléctrico, ó en su defecto, Loma Plata – Villamontes como la mejor opción en el análisis ambiental.
Con Chile existe una alternativa para la interconexión entre las subestaciones de Laguna Colorada y Chuquicamata, en 220 kV y capacidad limitada a 150 MW.
Con esta integración, se puede potenciar la generación geotérmica en la zona. La planta piloto Laguna Colorada – Bolivia (5 MW), fue licitada en septiembre de 2022 para su ampliación a 100 MW. El proyecto está en construcción y se prevé una línea de transmisión eléctrica de circuito simple de 230 kV, con una longitud de aproximadamente 170 km, entre la central geotérmica y la subestación Litio (San Cristóbal) para transportar la energía eléctrica generada en la planta geotérmica al Sistema Interconectado Nacional (SIN).
En el caso de Perú, el estudio señala que la interconexión eléctrica entre ambos países no es técnica, ni económicamente viable en las condiciones actuales debido a que ambos sistemas eléctricos aún requieren refuerzos en sus zonas fronterizas.
