La petrolera busca reducir costos en preparación para la transición energética.
Shell busca reducir los costos de producción de petróleo y gas hasta en un 40%, en una importante iniciativa para ahorrar recursos para que la compañía pueda transformar su negocio y centrarse más en los mercados de energía renovable y electricidad, dijeron fuentes a Reuters.
La nueva revisión de costos de Shell, conocida internamente como “Proyecto de remodelación” y que se espera que se complete a finales de este año, afectará a sus tres divisiones principales y tendrá como objetivo nuevos recortes al objetivo de $ 4 mil millones establecido al comienzo de la crisis Covid-19.
Reducir los gastos es vital para los planes de Shell de pasar al sector de la electricidad y las energías renovables, donde los márgenes son relativamente bajos.
También se espera que la competencia se intensifique con compañías rivales de energía y petróleo, incluidas BP y Total, que buscan competir por la participación de mercado a medida que las economías de todo el mundo buscan volverse más verdes.
“Tenemos un gran modelo, pero ¿es el modelo adecuado para el futuro? Habrá diferencias, y no sólo en la estructura, sino en la cultura y el tipo de empresa que queremos ser ”, dijo una fuente de Shell, que habló bajo condición de anonimato.
El año pasado, los costos operativos totales de Shell totalizaron $ 38 mil millones, mientras que las inversiones totalizaron $ 24 mil millones.
Shell está explorando formas de reducir el gasto en la producción de petróleo y gas, su división upstream más grande, en un 30% o un 40% mediante recortes de costos operativos e inversiones en nuevos proyectos, dijeron dos fuentes involucradas en el asunto.
Shell ahora quiere enfocar su producción de petróleo y gas en solo unas pocas regiones clave, incluido el Golfo de México, Nigeria y el Mar del Norte, dijeron las fuentes.
La división integrada de gas de la empresa, que administra las operaciones de gas natural licuado (GNL) y la producción de gas, también busca recortes, según las fuentes.
En el sector de distribución, la evaluación apunta a reducir costos en la red de servicios de 45.000 de Shell, la más grande del mundo, considerada una de sus actividades más valiosas y que debería jugar un papel clave en la transición, según las fuentes.
“Estamos en una revisión estratégica de la organización, que tiene como objetivo asegurarnos de estar preparados para prosperar durante la transición energética y ser una organización más simple, pero también competitiva en términos de costos. Estamos viendo una serie de opciones y escenarios en este momento, que están siendo evaluados cuidadosamente ”, dijo una portavoz de Shell en un comunicado.
El esfuerzo de reestructuración de Shell refleja los movimientos recientes de los rivales europeos y Eni, que planean reducir su enfoque en el petróleo y el gas en la próxima década y construir nuevos negocios con bajas emisiones de carbono.
Se espera que la revisión, que según fuentes de la compañía es la más grande en la historia moderna de Shell, se complete a fines de 2020, cuando Shell quiera anunciar una reestructuración importante.
En declaraciones a los analistas el 30 de julio, el presidente ejecutivo de Shell, Ben van Beurden, dijo que la empresa había lanzado un programa para “rediseñar” la empresa angloholandesa.
Extraído de EPBR
