En 2014, Bolivia producía 18,6 millones de barriles de petróleo al año, cifra que se redujo a 8,6 millones en 2023. Respecto al gas, la caída es de 21,766 millones de litros cúbicos en 2012 a 13,122 millones en 2023, es decir de un 40%.
El presidente, Luis Arce, mediante un discurso a los bolivianos abordó la declinación en la producción de hidrocarburos, lo que genera una mayor importación de combustibles en Bolivia y falta de dólares. Sin embargo, YPFB desarrolla el Plan de Reactivación del Upstream (PRU) con 56 proyectos exploratorios.
“El agotamiento de los pozos no ha sido reemplazado con la exploración y descubrimiento de nuevos campos petroleros y gasíferos para poder reemplazar la producción que se estaba agotando”, indicó Arce, refiriéndose a gestiones pasadas.
El presidente citó a los campos Margarita, Incahuasi, Sábalo, San Alberto y Yapacaní, que son los con mayor producción de gas y mostró la progresiva declinación ya que después de la nacionalización de los hidrocarburos, el gobierno de aquel entonces, no invirtió en exploración.
“Esta es la historia de todos los campos petroleros. También tenemos aquí Margarita, Huacaya, que tuvo su mejor producción hacia 2016, generaba 6.559 millones de metros cúbicos este campo y ahora 4.000. Está en descenso”.
Respecto a la producción fiscalizada de petróleo y condensado, la misma disminuyó un 54% desde 2014, lo que lleva al país a no producir el suficiente combustible y a la importación, con una demanda creciente.
En 2014, Bolivia producía 18,6 millones de barriles de petróleo al año, cifra que se redujo a 8,6 millones en 2023. Respecto al gas, la caída es de 21,766 millones de litros cúbicos en 2012 a 13,122 millones en 2023, es decir de un 40%.
En este aspecto, el PRU busca que el crudo y líquidos que se produzcan sean refinados por YPFB para la producción de diésel y gasolina.
El presidente Arce dejó en claro que la falta de exploración generó este declive en la producción y disminuyó la capacidad del país para exportar hidrocarburos, lo que reduce los ingresos en dólares y se concatena que las divisas que recibe Bolivia son invertidas en la subvención a los combustibles.
“Hubo un descuido significativo en la Nacionalización de los Hidrocarburos (…). Estamos viviendo las consecuencias de lo que no se hizo hace siete años”.
Sin embargo, el Plan de Reactivación del Upstream de YPFB ya cuenta con 18 resultados positivos. El mismo comenzó en 2021