El miércoles, un ciudadano paraguayo grabó un video en la estación de servicio Excel Norte, de Oruro, donde no le quisieron vender combustible para que continúe su viaje hacia Potosí, en su moto.
Rogelio Ortúzar -como el afectado se identifica en la grabación- llegó de paseo al país, pero se llevó la ingrata sorpresa de que por conducir un motorizado con placa de control extranjera no le podían vender gasolina.
Al menos eso le dijeron en las estaciones Nuestra Señora del Socavón y Excel Norte, donde, además de él, otros turistas que manejaban una vagoneta con matrícula chilena tampoco pudieron comprar combustible.
En respuesta, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) publicó ayer un comunicado, en el que menciona que se trató de un “hecho aislado que se originó por un error administrativo de la estación de servicio Excel Norte”, a la que suspendió de forma temporal, hasta que se “establezcan las responsabilidades”.
No obstante, más tarde la Asociación de Surtidores (Asosur) de Oruro se pronunció sobre el caso y culpó a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) por el “impedimento de ventas internacionales (de combustible) a extranjeros”.
A través de una carta dirigida al director distrital de la ANH, la Asosur Oruro informó que “la no venta de combustible a precio internacional por parte de las estaciones de servicio denunciadas se debió a la falta de dosificación por parte de YPFB, ya que sólo ellos pueden entregar la misma y son quienes controlan las fechas de vencimiento…”.
La asociación departamental también explicó que “pasados los acontecimientos negativos de los extranjeros denunciantes, el día de ayer (1 de mayo) se recibió las dosificaciones mencionadas. Como constancia adjuntamos algunas fotografías de recepciones a destiempo”.
Página Siete llamó ayer al responsable de Comunicación de YPFB, quien indicó que la ANH ya se había manifestado sobre el hecho y que analizarían una posible respuesta de la petrolera.
La subvención del precio de la gasolina en el país hace que cada litro de este carburante cueste 3,74 bolivianos, y para los extranjeros, a 8,68 bolivianos por litro.
(Página Siete)
