
La industria boliviana debe prepararse parael gas importado
Lo seguro es que el incremento en el precio del gas de la electricidad para las industrias será muy importante, pues pasará de ser gratis, a importado.
Por Segio Arnez, analista eléctrico

Como se sabe, la producción de gas natural en Bolivia está cayendo rápidamente y se estima que en muy poco tiempo se requerirá importar este combustible para cubrir la demanda interna. Si se hacen las gestiones necesarias a tiempo, lo más probable es que no falte gas, pues puede importarse el mismo de Argentina a través del gasoducto que servía para la exportación a ese país.
Sin embargo, el efecto que tendrá la importación de gas natural sobre las industrias de Bolivia será el incremento del precio del mismo, así como el incremento del precio de la electricidad, por lo cual deben prepararse para ello.
La caída de la producción de gas es tan acelerada, que una vez que alcance el nivel del consumo interno, de un año al otro se tendrá que importar prácticamente todo el gas necesario para la generación de electricidad.
Considerando un precio de gas importado de 10 $us/MMBTU, el costo de generación en el Mercado Eléctrico Mayorista se incrementaría de los actuales 35 $us/MWh a 90 $us/MWh, es decir 2.6 veces. Considerando que el costo de generación representa actualmente el 40% de la tarifa promedio al consumidor final, esta última se incrementara en casi 70% de un año al otro.
Por su parte, el precio del gas natural para las industrias subiría de 2.40 $us/MPC actual a 10 $us/MPC (prácticamente equivalente a 10 $us/MMBTU), mas los costos de transporte y distribución. Esto implica un incremento a 4 veces el precio actual.
La estimación citada es muy preliminar, pues el incremento real dependerá del precio del gas importado que el gobierno pueda negociar llegado el momento, (lo cual a su vez depende de la coyuntura energética mundial y regional), de si el incremento se aplicara a todos por igual o solo a los grandes consumidores, etc. Sin embargo, lo seguro es que el incremento en el precio del gas natural y de la electricidad para las industrias será muy importante, pues el gas pasará de provenir gratuitamente de la Madre Tierra a ser comprado de un país vecino. Y esto ocurrirá pronto, por lo que las industrias están a tiempo para prepararse.
Lo primero que las industrias deben realizar es un análisis de eficiencia energética para conocer lo que se puede hacer para reducir su consumo de gas y electricidad, e implementar lo posible. Por otro lado, también deberían realizar un análisis de manejo de carga eléctrica, para saber si es posible operar de una forma que reduzca la demanda eléctrica en el horario mas caro.
Las industrias que tienen acceso a Biomasa (cualquier residuo orgánico), deberían evaluar seriamente el uso de este recurso para substituir el gas natural para la producción de agua caliente o vapor, y/o para sustituir o reducir el consumo de electricidad de la red. Por ejemplo, las industrias procesadoras de carne en países con precios de gas y electricidad más altos que los nuestros actuales utilizan sus residuos orgánicos para producir biogás y suministrarlo a calderos para producir vapor o agua caliente, o a motogeneradores para producir electricidad; industrias algo mas grandes utilizan los residuos disponibles directamente como combustible en plantas de cogeneración (producción de electricidad y calor para proceso).
Para tener una idea, una planta de cogeneración de 2 MW eléctricos y 20 ton/h de vapor, compuesta por caldero y turbogenerador puede costar alrededor de 4 MM $us y requerir 5 a 10 ton/h de biomasa. Aunque el costo de inversión parece alto, esta sustituiría más de 1 MM $us/año en costos de electricidad de la red y gas natural al precio actual, que podría incrementarse a más de 2 MM $us/año.
Con la tarifa industrial actual, la instalación de paneles solares y aerogeneradores no es muy atractiva para la industria, debido a que los ahorros generados devuelven muy lentamente la inversión. Sin embargo, dado que la tarifa por concepto de Energía (no la de Potencia) se incrementará en aproximadamente 2.5 veces, la instalación de estos sistemas se tornará más interesante cuando se tenga que importar gas.
Dado que un proyecto de estos toma al menos un año de preparación (definición, financiamiento, etc) y al menos otro de suministro de equipos, construcción y montaje, las industrias están justo a tiempo para analizar el problema y encontrar soluciones que mantengan o incluso reduzcan sus costos de energía (gas y electricidad).
Como todo en la vida, esta gran amenaza puede transformarse en una gran oportunidad, dependiendo de como se encare.
