El colombiano José Miguel Acosta, consultor del Área de Coordinación de Transmisión de la Comisión de Integración Energética Regional (CIER), estuvo en Santa Cruz invitado por la Sociedad de Ingenieros para hablar de integración eléctrica. Pondera el trabajo que se desarrolla con Argentina y afirma que se puede interconectar desde México hasta la Patagonia.
¿Cómo ve el CIER el proceso de integración eléctrica que ha iniciado Bolivia, en el caso específico con Argentina?
Justamente CIER quiere decir Comisión de Integración Energética Regional y ese es el propósito, que tengamos integración. Todos esos avances que se están dando son muy positivos, estamos todavía en una etapa de interconexiones, de acuerdos binacionales, es importantísimo.
El trabajo que está haciendo ENDE en Argentina, es un tema muy interesante, y creo que esos son pasos muy encaminados para que podamos tener realmente integración.
Ya existe interconexión Colombia-Ecuador, Ecuador-Perú, y se proyecta otra línea. Bolivia tiene proyectos con Brasil y con Argentina, son varias cosas, algunas aisladas, pero creo que podemos ir avanzando en una dirección correcta de tener una visión integrada como región.
En Centroamérica funciona un único mercado con la línea de SIEPAC y la empresa propietaria de la red, y podemos pensar en tener algo así. Hay una normatividad para la Comunidad Andina que se está actualizando; hay otra comunidad para Mercosur, pero soy optimista en que podamos realmente hablar de integración un poco más adelante.
¿En qué beneficia al usuario final todo este tipo de integración?
Me parece interesante la pregunta. Creo que el propósito de la integración es hacer un mejor uso de los recursos, entonces si logramos hacer una integración real, va vender energía que el que esté produciendo de manera más económica; no importa si es en mi país o en el país vecino, porque eso pues va a beneficiar a todos los usuarios.
El Estado también se beneficia porque finalmente voy a tener energía más barata, no importa si es generada en el país o la compre afuera.
Entonces creo que es un tema en el que todos ganamos, gana el medio ambiente, habrán más empresas, vamos a tener más de respaldo energético, confiabilidad y habrán beneficios económicos.
¿Cómo ha avanzado la interconexión de Colombia a la de Centroamérica?
No hay interconexión Colombia-Panamá. Ese es un proyecto que se ha estado trabajando bastante en diseño con apoyo del BID (Banco Interamericano de Desarrollo). Tanto el Gobierno anterior como el actual de Colombia, firmaron un memorando de entendimiento con el Gobierno de Panamá. Con los actuales se está reactivando todo el tema y soy optimista en que ese proyecto se puede cristalizar.
¿Puede Colombia ser el nexo entre Centroamérica y Sudamérica?
Es que nos falta cerrar Colombia-Panamá pero lo ideal sería que estemos interconectados desde México hasta la Patagonia.
¿En cuánto tiempo se podría dar eso?
No me atrevo a decirle, yo pienso que estos proyectos son demasiado largos y tienen muchísimas aristas, pero creo que esto está despegando; se frena, arranca y se frena de nuevo. Pero pienso que puede salir adelante.
¿Una dificultad podrían ser los distintos ciclos en los que se trabaja en cada país?
Sí, manejamos diferentes voltajes, diferentes frecuencias, pero cuando hablamos de integración, uno puede hacerlas en alto voltaje en corriente directa. Entonces no importaría que unos estén a 50 ciclos y otros a 60 si se hace la integración y con interconexiones en HVDC. No tiene problema el voltaje domiciliario porque el usuario familiarmente conecta su computador o su teléfono que trabaja bien a 120 o 220 voltios.
Sin embargo, los motores sí están fabricados para un voltaje específico, pero en general la parte electrónica se adapta y, obviamente si hablamos de electromovilidad, habría que poner cargadores en el voltaje de cada país. Pero, digamos, esto no es un tema que impida que los procesos vayan adelante.
Ahora, la tendencia mundial de la electricidad es la electromovilidad. ¿En este sentido, todavía estamos atrasados en Latinoamérica?
Sí. Creo que estamos empezando, pero la idea de esos caminos es empezar con el pie derecho, hay que ajustar muchas cosas, desde la regulación… Hay que definir luego dónde pongo los cargadores. En un principio estaban en los centros comerciales, por ejemplo.
Pero ¿quién vende la energía? ¿cómo la compra? ¿cómo me la va a pagar el usuario? Entonces hay muchas cosas por regular y hay temas técnicos por resolver, pero creo que en todos los países se va avanzando en ese camino y vamos a llegar, unos más rápido que otros. Los gobiernos en general están también bajando impuestos para los vehículos eléctricos, entonces creo que debemos articular diferentes medidas con ese propósito.
¿Una de las trabas estaría en el sistema político o en los permanentes cambios de gobierno?
Puede ocurrir, no lo descarto pero de todos modos este es un tema que se vuelve inevitable. Entonces más que la política de un gobierno, es un tema de Estado y creo que todos vamos a llegar allá, unos más temprano que otros.
Pero esto es irreversible, igual están bajando los costos de las baterías y si uno mira el tema de energía solar, está bajando el costo de los paneles. Unos gobiernos podrán incentivarlos más que otros, pero pero es la realidad, no tiene reversa.
¿Qué rol puede tener el gas natural en estas tendencias?
El gas natural es en general una energía limpia con un bajo nivel de contaminación y, digamos que si yo tengo energía solar o eólica, no tengo energía garantizada las 24 horas, mientras que con el gas puedo tener una central de generación las 24 horas del día. Sigue siendo una alternativa muy interesante y cada vez, con la tecnología, el nivel de contaminación es muy bajo, entonces pienso que vamos a tener uso de gas natural para buena cantidad de tiempo.
PERFIL
Consultor para la CIER
Área Gestión del Conocimiento y Coordinación de Transmisión
Ingeniero eléctrico por la Universidad de Los Andes, Bogotá (Colombia). Tiene más de 37 años de experiencia en el rubro eléctrico. Trabajó en empresas como ISA o Red de Energía del Perú. Ocupó cargos importantes en el Gobierno colombiano.
