
Empresas de servicios: No se descuidó la calidad pese al estrés financiero
El exdirectivo de compañías como BG, Shell y Schlumberger en Bolivia fundó una empresa de servicios petroleros desde la cual sigue de cerca la actividad hidrocarburífera del país. Con optimismo, confía en que al menos un descubrimiento resulte exitoso y pueda dinamizar el sector.
Orlando Vaca Carranza cuenta con más de 20 años de experiencia en la industria energética, destacándose por su capacidad de liderazgo y adaptación en diversos entornos culturales y geográficos. Durante su trayectoria en Schlumberger, ocupó posiciones de dirección estratégica, liderando iniciativas de mercado tanto a nivel nacional como continental. Su trabajo lo llevó a diferentes regiones del mundo, incluyendo Latinoamérica, el Caribe, Norteamérica y África, donde se enfrentó exitosamente a complejos retos operacionales y geográficos, llegando a liderar una fuerza laboral de aproximadamente 7.000 empleados en la región.
Posteriormente, asumió el cargo de gerente general en BG y Shell, con responsabilidad sobre Bolivia y Paraguay. Durante sus 10 años en estas compañías, lideró proyectos emblemáticos como el desarrollo de los campos Margarita y Huacaya, la valorización de los campos La Vertiente, Los Suris y Palo Marcado, y la exploración del bloque Huacareta. Este último incluyó la adquisición de 1,200 km² de sísmica 3D, su interpretación y la perforación del pozo exploratorio Jaguar X6.
Los constantes cambios en el mercado lo llevaron a emprender su propio proyecto empresarial. Hace cuatro años fundó Petrolog Servicios Petroleros S.A., una empresa consolidada como Channel Partner de Baker Hughes en Bolivia y representante de otras compañías líderes en servicios y soluciones para el sector energético.
Como parte de la visión estratégica de Petrolog, Vaca proyecta incursionar en el sector como operador, aprovechando su vasta experiencia en exploración, explotación y servicios petroleros.
Como experto en el rubro, ¿cómo evalúa el desempeño actual del sector de servicios petroleros en Bolivia, tanto en términos de competitividad como en la calidad de los servicios que se ofrecen? ¿Cuáles son los principales desafíos que enfrenta este sector?
Es un hecho de que la actividad petrolera en Bolivia ha estado muy disminuida en los últimos años, razón por la cual, las empresas de servicios de renombre mundial han dejado de tener presencia en el país.
Aun así, las empresas de servicios petroleros que han permanecido activos en el rubro han sabido honrar su posicionamiento y soporte tecnológico de acuerdo con los requerimientos de los clientes.
La calidad del servicio está normalizada en las empresas, pero a costas de un deterioro financiero, más aún cuando ingresan al mercado nuevas compañías con una estrategia agresiva en precios, pero no así para brindar soluciones tecnológicas y de calidad.
Adicionalmente, el dilema por el cual estamos pasando las empresas de servicios, en cuanto a la importación de equipos y herramientas del exterior, con la escasez de dólares y con el pago por parte de clientes en moneda nacional crea una situación de alto estrés financiero.
¿Qué avances tecnológicos se han incorporado en el área de servicios petroleros en los últimos años y para optimizar sus operaciones?
Como mencioné anteriormente, la actividad petrolera en los años pasados ha sido muy baja, por lo tanto no se han podido desarrollar o introducir importantes implementaciones tecnológicas.
No obstante, a partir del año pasado se ha observado un incremento en la actividad exploratoria dando oportunidades al uso de nuevas tecnologías, específicamente la implementación de trépanos de última generación, ayudando a nuestros clientes con la mejora de manera eficiente en la perforación de sus pozos.
¿Cuáles son las expectativas del rubro de los servicios con respecto al crecimiento del sector hidrocarburífero en Bolivia, para los próximos cinco años?
Las expectativas son optimistas. Al momento existen cinco taladros perforando pozos exploratorios, de los cuales, al ser uno exitoso, desencadenará un plan exploratorio como proceso de delineamiento de reservorio, que conllevará una declaración comercial y consecuentemente habrá un plan de desarrollo; eso significa incremento de una actividad prominente.
En ese sentido, nuestra expectativa es que al menos resulte un éxito exploratorio para este 2025, y de este modo poder visionar en los próximos cinco años una dinámica en actividad petrolera, misma que no hemos vistos en los últimos 10 años.
¿Cómo afectan las políticas públicas y el marco regulatorio actual al desarrollo del sector de servicios petroleros en Bolivia? ¿Qué cambios considera necesarios para fomentar una mayor participación del sector privado y fortalecer la industria?
La respuesta es simple, se necesitan cambios fundamentales en lo que se refiere al régimen fiscal en el sector de hidrocarburos, una nueva Ley de Hidrocarburos que esté alineada con las necesidades actuales del mercado y así poder incentivar la inversión de las operadoras en Bolivia, pero al mismo tiempo atraer nueva inversión externa y operadores que vengan a realizar exploración.
Las empresas de servicios dependen de la actividad de las operadoras y de una relación comercial de mutua colaboración. Al final, como un solo equipo, ambos se necesitan para poder subsistir en el upstream.