
María Haydeé Jiménez: “Necesitamos nuevos diseños de mercado”
Las energías renovables necesitan otras energías limpias amigas para avanzar. Animamos a las sociedades a utilizar aquellas políticas disponibles: no hay una bala de plata ni una tecnología verde, y las recetas prematuras son generalmente poco accesibles. La clave está en maximizar la energía y minimizar las emisiones.
El 26º Congreso Mundial de Energía organizado por el World Energy Council (WEC) juntamente con el Gobierno de los Países Bajos, se desarrollará a fines del mes de abril de 2024 en Rotterdam, Países Bajos. María Haydeé Jiménez, Senior Regional Manager de la región Latino América y el Caribe del World Energy Council habla de la importancia de este encuentro dada la coyuntura mundial y de transición energética.
¿Cuáles son los temas centrales a tratarse en el 26 Congreso Mundial de la Energía a celebrarse el próximo año 2024, en Rotterdam y por qué se dice que es el momento más significativo de la energía en 100 años?
Durante 100 años, el Congreso Mundial de la Energía ha reunido el poder de cooperación de la comunidad energética mundial para convertir la inspiración en acción.
El 26º Congreso es un punto de inflexión decisivo para las transiciones energéticas limpias e inclusivas en todo el mundo y una oportunidad para avanzar en el diseño y el suministro de un futuro energético mejor.
El tema central será rediseñar la energía para las personas y el planeta, el cuál reconoce este momento significativo en el liderazgo energético mundial y la urgencia de soluciones nuevas e inclusivas para abordar los retos energéticos, y climáticos que estamos atravesando. Este es, sin duda un momento de gran importancia para conversaciones y conexiones que asegurarán nuevas posibilidades de una energía mejor para todos.
¿Qué significa rediseñar la energía para las personas y el planeta, cómo lograrlo?
Nos encontramos en un punto de inflexión crítico para el liderazgo en las transiciones energéticas limpias e inclusivas en todo el mundo y tenemos la oportunidad para dar un salto adelante en la forma de pensar la energía para las personas y el planeta.
El World Energy Council (WEC) cuenta con una red basada en la experiencia y los conocimientos colectivos a nivel global existentes desde hace 100 años.
A través de nuestra red es posible compartir los problemas críticos que afectan a las personas que están en el centro de las transiciones energéticas en todo el mundo.
Necesitamos pensar en nuevos diseños de mercado. A través de las sesiones de discusión del próximo Congreso en Rotterdam se busca dar visibilidad a las diferentes realidades energéticas, compartir historias reales de transiciones exitosas basadas en diferentes lugares de todo el mundo.
Para rediseñar la energía se necesita incluir en la conversación a todo el ecosistema energético, desde los productores y proveedores hasta los consumidores y usuarios de energía y eso es lo que WEC quiere lograr a través de este evento de impacto global. El congreso congrega a más de 7.000 participantes internacionales del sector de la energía, 100 expositores y una asistencia total de 18.000 personas a lo largo de sus cuatro días de duración. El Congreso conectará e inspirará a líderes y profesionales de la energía y también futuros líderes energéticos de todo el mundo.
¿Qué aspectos deben considerarse para llegar a una transición de energía limpia y justa?
Me gusta mucho citar a nuestra Secretaria Ejecutiva y CEO, Angela Wilkinson, quién define muy claramente las lecciones que pueden extraerse de la historia de la comunidad energética mundial en los últimos 100 años y que deben considerarse cuando hablamos de transición energética: La energía es un sistema, no puede reducirse a una sola medida. Nos encontramos replanteándonos la seguridad y la resiliencia. La pandemia amplió la resiliencia más allá de los activos físicos, las personas y las comunidades. Debemos pensar en nuevas métricas de acción para el acceso productivo y justo a la energía.
Es un proceso y se deben desarrollar opciones beneficiosas para todos que sean más seguras, asequibles y sostenibles. Para lo anterior, el marco del Trilema Energético Mundial es la herramienta por excelencia para medir el desempeño de ciudades, países y regiones y definir políticas públicas en torno a la transición energética.
La diversidad en la energía está aumentando en el sentido más amplio: no hay una talla única para todos. Apoyamos a las diversas regiones y comunidades para que lideren y aprendan unas de otras y así eviten perder el tiempo y reinventar las políticas exitosas ya existentes.
Las energías renovables necesitan otras energías limpias amigas para avanzar. Animamos a las sociedades a utilizar aquellas políticas disponibles: no hay una bala de plata ni una tecnología verde, y las recetas prematuras son generalmente poco accesibles. La clave está en maximizar la energía y minimizar las emisiones.
El futuro de la energía va a ser más exigente. Trabajamos en soluciones impulsadas por la demanda implicando a la nueva y creciente diversidad de usos y usuarios de la energía.
La transición energética es actualmente más un reto de transformación social que de innovación tecnológica. Nos enfrentamos a un gran punto ciego en la implementación: la falta de conocimientos prácticos para gestionar cientos de miles de transiciones energéticas limpias y justas, diversas y basadas en cada lugar.
El contexto es importante a la hora de rediseñar los mercados: Necesitamos nuevos diseños de mercado. Estamos convocando diálogos de liderazgo constructivo sobre la reconexión del precio, los costos del sistema y la asequibilidad.
El futuro de la energía no se puede predecir, pero un mejor futuro energético se puede cocrear. Trabajamos con principios esperanzadores, pero a la vez realistas y buscamos incluir a más personas y comunidades en el progreso de las transiciones transformadoras. Nuestro objetivo es lograr un cambio radical en los conocimientos energéticos para 2030.
Necesitamos un nuevo enfoque de la política energética: la transición energética no se produce en el vacío e interactúa con las transiciones industrial, demográfica y agrícola. Estamos trabajando en un enfoque más sistémico de la política energética.
Debemos revisar las recientes crisis: la crisis financiera mundial de 2008, el Covid-19- e incluir el aprendizaje con el fracaso de transiciones energéticas anteriores y en curso. Para esto se requiere de humildad.
Perfil
María Haydeé Jiménez es Senior Regional Manager de la región Latino América y el Caribe del World Energy Council. Su base es en Santiago de Chile y es ingeniera Comercial.
Es parte del Secretariado Global de WEC, Reino Unido y tiene experiencia en temas relacionados a energía desde su desempeño como Directora de Proyectos en el capítulo local de WEC Chile.